Nuestra sociedad ha experimentado en nuestro país una transformación claramente apreciable, desde que hace más de tres décadas del pasado siglo XX, fuimos niños y estuvimos juntos en nuestro cole durante muchos años de nuestra infancia, hasta la actualidad globalizada del siglo XXI.
Hoy ya superada la primera década del actual siglo XXI, la evolución de nuestra sociedad ha sido aplaudida por unos y denostada por otros, pero lo que no ofrece ninguna duda es que las cosas han cambiado y mucho, desde que nosotros acudiamos cada día a estudiar a los Escolapios de la Malvarrosa.
Sin embargo, las personas tenemos una cierta tendencia a encajar en nuestra vida las transformaciones que se van produciendo en el ámbito personal, laboral o social olvidando con relativa facilidad las referencias previas: aquello que mejora pasa a considerarse "normal" y nuestra atención se centra exclusivamente en lo que todavía no satisface nuestras expectativas. Por eso, de vez en cuando, es conveniente pararse y mirar hacia atrás para recordar el punto de partida y el camino recorrido, revisar lo pendiente, aprender de los errores y reconocer y alegrarnos con los logros alcanzados.
Y de verdad, que el que suscribe se siente feliz, volviendo a compartir por segundo año consecutivo, una cena con los compañeros del cole de nuestra EGB.
El año pasado hicimos lo más difícil, y este año gracias al tesón y la constancia de Jorge y Roberto, que se han preocupado de movilizarnos de nuevo, y a las ganas de los que hemos acudido a compartir vivencias y experiencias un año más, podemos concluir que el éxito en la vida, se alcanza con estas pequeñas cosas, que nos generan ilusiones y sentimientos.
Nuestra vida es un simple reflejo de nuestras acciones, y si deseas felicidad, da felicidad, y es bueno aprender a valorar lo que tenemos, y quiero deciros, que compartir un ratito con vosotros cada año, y parar en nuestra rutina, a mi personalmente, me proporciona felicidad.
Además creo que la vida, no se mide por la fama de nuestra familia, ni por el dinero que tenemos, ni por la marca de coche que manejamos, ni por el lugar donde trabajamos.
No se mide ni por lo guapos ni por lo feos que somos, ni por la marca de ropa que llevamos, ni por los zapatos, ni por el tipo de música que nos gusta.
La vida, simplemente, es otra cosa .
La vida:
Se mide según a quién amamos y según a quién dañamos.
Se mide según la felicidad o la tristeza que proporcionamos a otros.
Se mide por los compromisos que cumplimos y las confianzas que traicionamos.
Se mide por el sabor de boca que dejamos a los demás con nuestra presencia y con nuestros comentarios.
Pero por la mayor parte, se trata de sí usamos la vida para alimentar el corazón de otros.
Tú y solo tú escoges la manera en que vas a afectar a otros y esas decisiones son de lo que se trata la vida…
La vida será contigo tan justa como lo eres con los demás.
Hacer un amigo es Fácil.
Pero la vida habla de ti, por aquellos amigos que fielmente supiste conservar.
Por aquellos a los que te supiste entregar sin exigencias y compartir con ellos
una buena cena, aunque sólo sea una vez al año.
Aquellos con los que compartimos tantas cosas de niños, y como decía Germán a pesar de haber pasado tantos años nos seguimos estimando.
Bueno, muchos dirán, Paco corta, el rollo ya, pues si teneis razón, sigo siendo un rollero, pero queria que supierais, que a mi por lo menos, me hace feliz, cenar con vosotros una vez al año, y espero que sean muchos más.
Y Botelleta me decía, que este año habia estado poco colaborador.Pero si es que él lo hace genial, y encima hemos estado cenando en el negocio de un compañero como es nuestro querido Vicente Portero, y nos ha tratado genial.Te recuerdo Jorge que las fotos me han vuelto a tocar a mi, así que cada uno iremos asumiendo nuestro rol.
Espero poder poner pronto, las fotos en nuestro blog.
Bueno lo dicho, SOIS COJONUDOS, y ya sabéis que tenemos una nueva CENA el 10 de noviembre de 2012 .
Un abrazo a todos.
Paco Celdrán
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